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viernes, 18 de septiembre de 2009

Catorce vidas son dos gatos (Fito & Fitipaldis)


Cuánto se grito diciendo nada
No pudimos ver con tanta luz
Yo buscaba el cielo en tu mirada
Y nunca sabré lo que encontraste tú.
Que te traigan flores las mañanas
Que no pases noches sin dormir
Que un sueño se pose en tus pestañas
Uno de esos sueños que me sueña a mí.
Detrás del viento un huracán
Se fue formando en la cabeza
Cuando te cansas de sufrir, siempre me dejas.
Mi corazón es de cristal
No guarda nada que no veas
Sólo un pequeño resplandor de nuestra hoguera.
Mi canción que nace del fracaso
Es sólo una piel sobre la piel
Algo que se besa y sabe amargo
Es mi boca seca, nada que beber.
Pobre corazón que no sabe que decir
Si te vas por lo que soy
O por lo que nunca fui.
Hay caminos que hay que andar descalzo
Ya no te preocupes más por mí
Siempre me entra arena en los zapatos
Esta vez me quedo aquí.
Si te cabe el cielo en un abrazo
Siempre habrá una estrella para ti
Si catorce vidas son dos gatos
Aún queda mucho por vivir…
Catorce vidas son dos gatos- Fito y Fitipaldis

viernes, 19 de diciembre de 2008

Be my baby, I'll look after you


Sin tiempo para actualizar, así que sólo os recomendaré una canción que me parece preciosa y que no he podido dejar de escuchar una y otra vez: Look after you de The Fray.
Un grupo muy interesante con otras canciones memorables: How to save a life (BSO Anatomía de Grey), You found me (BSO Perdidos) o Over my head.


Be my baby, I'll look after you...

viernes, 14 de noviembre de 2008

Princesa del subterfugio: quiso, y no pudo, ser hada. El cuento le traicionó


Tenía los ojos más bonitos nunca vistos,
mas tenía el corazón más desdichado.
Tenía el alma llena de marcas de mordiscos
y un amor descafeinado.
Tendrías que haberla visto correr
tras caricatos, palmeros, cantautores.
Tendrías que haberla visto morir de mal de amores.
Bruja de corazón sucio como un lavabo de hombre
princesa del subterfugio,voy olvidando su nombre.
Bruja de corazón roto
como un cristal contra el suelo,
ya no me duerme su foto las noches que me desvelo.
Tenía un billete de ida y vuelta a mi cabeza,
el finiquito por despido en mi memoria.
Tenía la llave de la puerta de salida de mi vida,
de mi mente, de mi historia.
Tenía un trato con Lucifer, salió perdiendo,
resultó que era mi amigo,
lo conocí en el Averno que escondía tras su ombligo.
Bruja de corazón sucio
como un lavabo de hombres:
princesa del subterfugio,
voy olvidando su nombre.
Bruja de corazón roto
como un cristal contra el suelo,
ya no me duerme su foto las noches que me desvelo.
Tenía una boca desbocada, quiso, y no pudo, ser hada,
el cuento le traicionó.
Tenía lo que yo, es decir, nada, una mañana desolada,
hasta el sol la abandonó.
Tendrías que haber olido su piel,
aquel perfume se perdía entre sus dudas,
jamás le trajo una carta el cartero de Neruda.
Bruja de corazón sucio
como un lavabo de hombres:
princesa del subterfugio,
voy olvidando su nombre.
Bruja de corazón roto
como un cristal contra el suelo,
ya no me duerme su foto las noches que me desvelo.
Princesa del subterfugio, Dani Flaco.
Descubriendo poco a poco a este cantautor que reafirma mi gusto por los hombres de voz desgarrada.
Videoclips para conocerle un poquito más: Princesa del subterfugio La ley del último trago y aquí podéis escuchar la estupenda versión que ha hecho en catalán: La llei de l'última copa.

lunes, 8 de septiembre de 2008

Y qué mejor manera de volver a casa que...

disfrutando con todos los sentidos de Chris Martin. ¡Sublime concierto de Coldplay!
And I will try to fix you...

miércoles, 2 de julio de 2008

Y la eternidad duró lo que dura un fin de semana



Acabo de leer en El Periódico que esta tarde TV3 emite una de mis películas favoritas: Los puentes de Madison (Clint Eastwood, 1995). Algún día hablaré largo y tendido sobre esta GRANDÍSIMA HISTORIA DE AMOR. Creo que pocas veces un semáforo y la manivela de la puerta de un coche han simbolizado, y han hecho llorar, tanto...

De momento, aprovecho la ocasión para presentaros a un gran cantante que he descubierto hace poco y de forma casual: Pablo Moro. Su canción Lo que dura un fin de semana, me evocó irremediablemente las escenas más bonitas de esta película.


Te ví en el corazón de aquel disco que giraba
empañando los cristales con acordes de Tom Waits.
En el humo de la noche tu cuerpo se desnudaba
y rodaban por el suelo las fronteras de tu piel.

Planeaste un viaje “al moro” mirando por la ventana
cómo las gotas de lluvia desgarraban la ciudad,
y volviste sonriendo a meterte en la cama
y la luna de madrugada se durmió en tu paladar.
Entre versos de Allen Ginsberg ensuciando nuestra almohada
renunciamos a ser tristes prometiéndonos mañana.
Y la eternidad duró lo que dura un fin de semana.

Llenamos nuestras bocas con millones de deseos
y drogamos nuestros cuerpos con poemas de William Blake.
Aquel era el principio del camino del exceso
y aprendimos la respuesta al enigma del querer.
“Lléname de tus historias, que se detengan las horas.
Regálame la llave de tu imaginación.
Ojalá la vida fueran sólo estas pequeñas cosas.
Ojalá el mundo existiera sólo en esta habitación”.

“El viaje más infinito que te puedo prometer
llega sólo hasta el domingo más triste de cada mes”.
Algo se rompió en silencio. Empezaba a amanecer.
Te vestías muy tranquila y yo cogí la guitarra.
“Quizá sea ésta la última canción que cantaré”.

De tu viaje al fin del mundo yo no quise saber nada.
De mis noches sin futuro te negaste a conocer.
Y en el autobús de vuelta mirabas por la ventana
memorizando el paisaje que no volverías a ver.
En la puerta de tu casa no hizo falta decir nada.
“No me mientas, no me digas nunca te olvidaré”.

Y entre calles solitarias recuerdo aquel par de días
maldiciendo cada lunes con toda su realidad.
Qué puta es la vida a veces,y otras qué de verdad.